jueves, 12 de julio de 2012

 Creo que no hay mayor dolor que el de haberse enamorado por primera vez. Se que la palabra enamorarse muchas veces confunde y nos hace pensar que viene de la mano con la felicidad, pero en mi caso no fue así.
 Solo viví lindos momentos. Pocos momentos. Y aunque para mi el significado de felicidad se parezca mucho a esto, créanme que esta vez no se asemeja ni un poco. El amor no correspondido no tiene nada de feliz. Todo muy confuso y paradójico.
 Siempre tuve ese pensamiento de ''El dolor es otra forma de sentirnos vivos'' pero cuando uno se acostumbra a ese dolor, pierde. Ya no importa cuantas veces nos hizo llorar tal persona, alcanza con saber que va a seguir ahí un rato más. Nos basta con mentirnos un poquito para creer que la suerte puede cambiar para mejor. Uno sabe que hay cosas que por mas que intentes, no pueden ser pero pocos pueden verlo a tiempo. 
 Yo creo que el problema es pensar que nunca vamos a encontrar a alguien mejor, que no existe nadie más. Es increíble como podemos llegar a dar hasta lo que no tenemos con tal de recibir un poco de atención. Como dejamos que alguien nos arrebate el alma sin necesitar nada a cambio. 
 Se que nada se compara con pasar pequeños pero importantes momentos con alguien que queremos, que el simple hecho de sentirlo cerca es increíble, pero cuando esa persona solo se interesa por vos un rato y no te valora realmente, duele. Y duele tanto que no se explica. No querer ver la realidad y seguir adelante pensando en que todo va a estar bien, es mentirse. Ser hipócrita con uno mismo.
 Nos enamoramos hasta limites insospechados de quienes menos lo imaginamos. Porque el amor es así, llega cuando nos buscas nada para convertir a alguien en absolutamente todo.